En el mundo ya hay más de 3.000 millones de personas con acceso a internet. La brecha entre las personas que tienen acceso a las nuevas tecnologías y las que no se reduce pero esta transición sigue siendo demasiado lenta.
La Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), organismo dependiente de la ONU que se encarga de medir anualmente distintos indicadores de desarrollo, acceso y uso de TICS en 166 países del mundo, destaca que desde el 2004 solo accedía a internet el 9% de las poblaciones más pobres, mientras que en el 2014 la cifra es de un 30%.
Si bien la sociedad digital ha aumentado, hay que tener en cuenta que el número de personas que aún no tiene acceso a internet es demasiado alto, 4.300 millones de personas. De estos, el 90% habita en países en vías de desarrollo.
Las palabras de Hamadoun I. Touré, secretario general de la UIT, defienden el potencial de las nuevas tecnologías para mejorar el mundo, en especial para “los más pobres y privados de derechos como mujeres, jóvenes y personas con discapacidad”.